Martes 15 de Agosto de 2006

Concentración

Estar atento no es algo que sucede espontáneamente. Tienes que hacer que suceda. Concentrarse requiere trabajo. Un trabajo fundamental e inevitable si uno pretende conseguir algo que tenga valor.

Prestar atención requiere de un esfuerzo intencionado y enfocado. Si tan sólo simulas prestar atención, o si no puedes poner toda tu energía en mantenerte atento, te engañas a ti mismo y te pierdes los enormes beneficios que una adecuada concentración puede generar. Tu atención te conecta con el mundo que te rodea. Haz que esa conexión sea tan fuerte como puedas.

La calidad y naturaleza de tu conexión –en qué te concentras, el tiempo durante el cual puedes mantenerla, en qué medida se mantiene- pueden generar una enorme diferencia respecto de cuán efectivamente alcanzas tus objetivos. Tu atención es una de las cosas más valiosas con que cuentas. Fortalécela, dale poder y foco, y podrás alcanzar cosas realmente grandiosas.

— Gabriel Sandler

Se afortunado Llegó el momento next

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