Lunes 25 de Septiembre de 2006
Deséchalos
Cuando un pensamiento negativo, ya sea de enojo, celos, frustración, duda, preocupación, desprecio o temor se cruce por tu mente, tan sólo golpéalo. Visualízalo como si fuese un objeto, quizás un pequeño cubo, apoyado sobre tu cabeza. Luego visualízalo cayendo al piso y rompiéndose en mil pedazos.
Reemplázalo inmediatamente por esta pregunta: ¿Qué puedo hacer para mejorar la situación? y si no hay nada que puedas hacer, simplemente sigue adelante. No tiene sentido quedarse dando vueltas sobre algo en lo que uno no puede influir. Si hay algo que puedas hacer para mejorar la situación, hazlo. Empieza de inmediato. Utiliza la energía de aquel pensamiento negativo original y enfócala positivamente. Haz algo.
La opción es clara. Puedes quedarte revolviendo esos pensamientos negativos dejando que se pudran en tu mente, o puedes romper esa parálisis haciendo algo al respecto. Adivina cuál de estas opciones te llevará al éxito y la realización que deseas. Se trata de una técnica muy simple, algo que cualquiera puede llevar a cabo, y funciona desde la primera vez que la pones en práctica. Tira cada uno de esos pensamientos al suelo, uno por uno, y llena ese vacío con acciones y actitudes positivas. Es una combinación tangible, probada y ganadora.
Gabriel Sandler
Hacia la luz Felicidad en el esfuerzoTweet | |||
©2006 Ralph S. Marston, Jr. - derechos para traducción al Español y su distribución mundial exclusivamente y en exclusividad para Gabriel Sandler. Todos los derechos reservados.