Jueves 27 de Diciembre de 2007

Cuán lejos puede llegar

Tu actitud es extremadamente contagiosa. Se propaga con cada encuentro accidental, con cada conversación telefónica, con cada correo electrónico. La gente, contagiada por tu actitud, la hace llegar luego a otros que, a su vez, la vuelven a pasar. Y en la medida en que tu actitud se esparce día tras día a todo lo largo y lo ancho de tu mundo, marca una diferencia en cada uno de los lugares que toca.

Una sonrisa en la mañana puede haberse multiplicado, para cuando llegue la tarde, en suficiente fuerza como para alentar a miles de vidas. No se puede predecir, realmente, cuán lejos puede llegar.

Cuando actúas de manera consistente con amabilidad sincera, con consideración, respeto y verdadero entusiasmo los beneficios van mucho más allá de tu propia persona. Tu actitud, de hecho, ayuda a definir en qué tipo de ambiente vives cada día. No sucede a través de alguna fuerza oculta o misteriosa. Es algo que puedes ver, comprender y en lo cual puedes influir cada vez que entras en contacto con los demás.

¿En qué tipo de ambiente preferirías vivir hoy? Vive con una actitud tal, que haga que sea como deseas.

— Gabriel Sandler

En paz Éste es next

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