Martes 14 de Noviembre de 2006

Claridad

Tus metas ¿te resultan suficientemente claras y concretas? ¿O son sólo conceptos vagos y confusos? Cuanto más vívidamente puedas ver hacia dónde deseas dirigirte, más efectivo serás a la hora de decidir cómo encaminarte hacia allí.

"Quiero conocer el mundo" es una meta suficientemente ambiciosa y sin embargo, no tiene la fuerza suficiente porque carece de ciertos detalles como para empujarte hacia ella. Agregar cuestiones específicas como por ejemplo "Me he propuesto cruzar el Océano Pacífico en velero, escalar los Alpes, o recorrer la Gran Muralla China" dará sustancia a la meta, convirtiéndola en algo real y tangible.

¿Quieres comprarle el “regalo perfecto” a alguien? Mientas no definas cuál es el objeto específico del que se trata, no podrás hacerlo. Para que las intenciones se conviertan en realidades, deben ser claras y específicas.

Llena tus deseos de detalles, y le estarás dando alas a tus sueños. Saber qué es exactamente lo que deseas te llevará naturalmente a descubrir cómo conseguirlo. Si no estás pudiendo llegar a donde deseas ir, trata de hacer que la meta se vuelva más clara y específica. Cada uno de los vívidos detalles que puedas agregarle definirá un poco más claramente tus esfuerzos y los enfocará mejor. Ve la meta con la claridad suficiente, y verás claramente el camino hacia allí.

— Gabriel Sandler

Cambio de actitud Más por tu esfuerzo next

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