Viernes 14 de Diciembre de 2007
Ponle alegría
Ponle alegría a cada instante, sea éste como sea. En lugar de depender de las circunstancias con las que te encuentres, empieza a insuflar tu propia alegría en los sitios a los que vas y en las cosas que haces.
Siempre queda lugar para una sincera y verdadera alegría, hasta en las más difíciles situaciones. Y es en esas situaciones que un corazón agradecido, alegre y positivo puede marcar la mayor de las diferencias.
Los demás podrían considerar que cierta y determinada tarea resulta aburrida, tediosa, agotadora, pero esa no es otra cosa que su opinión. Encarando esa misma tarea con alegría y entusiasmo podrías agregarle muchísimo valor.
No tienes por qué quedarte esperando que la alegría venga a ti. Eres perfectamente capaz de esparcirla tú mismo por todas partes. Tanto en el trabajo como en el placer, en las buenas épocas así como cuando las cosas se complican, ponle alegría. Si hay una razón, si no la hay, hasta cuando haya razones como para que no, aporta tu cuota de alegría.
Ponle alegría a cada instante y allí la encontrarás.
— Gabriel Sandler
Los superarás Estás aquí
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©2007 Ralph S. Marston, Jr. - derechos para traducción al Español y su distribución mundial exclusivamente y en exclusividad para Gabriel Sandler. Todos los derechos reservados.