Martes 14 de Junio de 2016
Sinceramente interesado
Decir que te importa es muy fácil, e incluso parecer que te importa. Hacerlo de verdad es mucho más difícil.
Interesarse sinceramente por los demás no pasa simplemente por ser amable y agradable. De hecho, si de veras te importa, muchas veces debes disentir, aunque quedar bien y aparecer simpático sería mucho más fácil.
A veces, la palabra más amorosa y cuidadosa que podrías decir, es no. Hay momentos en los cuales la respuesta más respetuosa y considerada es disentir.
Desafiar a las personas a dar lo mejor de si mismas es mucho más estimulante que dejarlos tan sólo transcurrir con esfuerzos a media máquina. Ayudar a las personas a volverse autosuficientes es una actitud de muchísima más generosidad que permitirles caer en la dependencia de tu propia generosidad, aunque esto es también mucho más difícil de hacer.
A veces lo mejor que podrías hacer por alguien sería creer en su propia responsabilidad. Una de las cosas más valiosas que podrías darle a los demás es la oportunidad, así de complicado como pueda resultar, de fortalecerse, de volverse más capaz y más responsable.
El mundo clama por gente a la cual le importe, pero ser amable y generoso no es suficiente. Interésate lo suficiente como para respetar, desafiar realmente, insistir en alcanzar ni un poquito menos que lo mejor posible, y lleva permanentemente a aquellos que te importan hacia un nivel más elevado.
Gabriel Sandler
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