Lunes 18 de Julio de 2016

Hazte amigo de la realidad

Aunque los factores limitantes puedan constituir una carga, también pueden ofrecerte un marco de referencia sólido y predecible sobre el cual operar. Lo que en primera instancia podría parecer un obstáculo podría terminar resultando de gran ayuda.

Por ejemplo, la fuerza de gravedad hace que mover una roca grande y pesada resulte difícil. Pero esa misma fuerza también asegura que la roca permanezca en su lugar una vez que la hayas ubicado allí donde querías.

Actuar según las reglas y adherir a una disciplina muy estricta hace que conseguir lo que te propones resulte más difícil. Y sin embargo, también juega un rol fundamental en hacer que el logro resulte posible.

Ninguna situación resulta limitante por si misma. Porque tienes la capacidad de ajustar y adaptarte y aprovechar cualquier factor que pueda presentarse.

Un muro de ladrillo maciso puede detenerte en seco, o puede ofrecerte una base sólida sobre la cual comenzar a construir. Todo depende de lo que decidas hacer con aquello que encuentres en el camino.

En lugar de considerar que algo constituye un factor limitante, haz el trabajo necesario para convertirlo en un factor habilitante. Hazte amigo de la realidad, aprovechándola de manera positiva.

— Gabriel Sandler

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