Lunes 16 de Mayo de 2005

Superando el arrepentimiento

Claro que hay cosas del pasado que preferirías no haber hecho. Y seguramente darías cualquier cosa por haber hecho cosas que has dejado pasar.

El arrepentimiento puede ser muy doloroso, y aún así en su dolor también hay fuerza. Porque en cada arrepentimiento está la posibilidad de aprender, de ajustar y de mejorar.

Cuando percibas el escozor del arrepentimiento, date permiso de sentirlo por un momento. Luego toma esa energía negativa y transfórmala en algo positivo.

En lugar de seguir revolcándote en el arrepentimiento, aprende de tus errores y haz algo al respecto. Nada puedes hacer para modificar el pasado, pero lo que sí puedes cambiar es lo que vas a obtener a partir de lo que hayas hecho en ese pasado.

Lo mejor que puedes hacer con el pasado es aprender lo más posible de él. Sean cuales fueren tus arrepentimientos, trasciéndelos permitiendo que su dolor te enseñe algo.

Luego avanza confiado, con más sabiduría y experiencia a tu favor, con más firme e incansable determinación que nunca.

— Gabriel Sandler

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