Sábado 4 de Octubre de 2008

Pensamiento elevado

A medida que transcurra el día proponte reemplazar las preocupaciones que ocupen tu mente por pensamientos de paz. Reemplaza los pensamientos centrados en debilidades por otros concentrados en fortalezas.

Cambia pensamientos de limitaciones por pensamientos de posibilidades. Reemplaza los de enojo por otros de compasión.

Deja de lado todo pensamiento relacionado con frustración e impotencia. En su lugar, pon algunos de creatividad y empuje.

Reúne tus pensamientos dispersos y enfócalos, todos ellos, en una misma dirección, positiva y productiva. Te sorprenderás por la fuerza que tienes en tus manos cuando cada uno de tus pensamientos trabaja para mejorar a los demás.

Tus pensamientos determinan lo que decidirás hacer con todo lo que tienes. Y tú determinas cómo serán tus pensamientos.

Así que ponlos a trabajar momento a momento, día tras día. Haz que resulten, todos ellos, pensamientos útile

— Gabriel Sandler

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